Fondos de inversión en México llegan a nuevo máximo histórico

Los fondos de inversión en México continúan mostrando un desempeño sobresaliente. Al cierre del primer trimestre de 2025, el valor total de los activos administrados alcanzó los 4.493 billones de pesos, lo que representa un crecimiento anual de 24.56% y un avance mensual de 1.30%, según datos de la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles (AMIB).

Esta cifra marca un nuevo máximo histórico para el sector. Actualmente operan 636 fondos de inversión en el país, de los cuales 382 están orientados a instrumentos de renta variable y 254 a portafolios de deuda. Este equilibrio refleja una oferta diversificada que permite a los inversionistas acceder a distintos perfiles de riesgo y horizontes de inversión. En cuanto al número de clientes, también se reporta una expansión considerable. 

Al cierre de marzo, las operadoras de fondos registraron un total de 12,141,371 clientes, con una marcada preferencia por los instrumentos de deuda (11,562,310 clientes), frente a los que invierten en renta variable (579,061). Esto confirma que el perfil del inversionista mexicano sigue siendo predominantemente conservador, privilegiando la estabilidad sobre la exposición al riesgo.

La estabilidad macroeconómica y el fortalecimiento del ahorro interno han sido claves para sostener este crecimiento. Al mismo tiempo, el contexto ofrece oportunidades relevantes para ampliar el alcance de estos instrumentos. El crecimiento en el número de clientes refleja una mayor apertura del público a explorar alternativas de inversión.

Esta tendencia crea espacio para que las operadoras desarrollen productos más especializados, atraigan nuevos perfiles de inversionistas y contribuyan a cerrar la brecha histórica de baja inclusión financiera en el país.

La concentración de los recursos en instrumentos de deuda refleja una falta de apetito por el riesgo que limita el desarrollo de alternativas más dinámicas, como fondos de capital privado, infraestructura o tecnología. También sigue siendo un desafío la baja participación de inversionistas institucionales extranjeros, que podrían aportar profundidad y liquidez al mercado.

A estas debilidades se suman amenazas externas e internas que deben considerarse con atención. Factores como la volatilidad internacional, los movimientos en tasas de interés y la incertidumbre política podrían afectar el desempeño de los fondos, particularmente los expuestos a renta variable. Asimismo, cualquier retroceso en la calidad de la regulación, la supervisión o la transparencia podría frenar la confianza que hoy impulsa al sector.

El crecimiento sostenido en activos administrados y en número de inversionistas subraya el fortalecimiento de la cultura financiera en el país. A nivel empresarial, se trata de un entorno que favorece la disponibilidad de capital, impulsa el desarrollo de nuevos vehículos de inversión y abre oportunidades para que empresas de diversos sectores encuentren financiamiento a través del mercado bursátil.

La evolución de los fondos confirma que México avanza hacia un mercado financiero más maduro, robusto y con mayor participación de actores nacionales, aunque con tareas pendientes para consolidar su competitividad frente a otras economías emergentes.

Collaboration: Editorial Auge.

Sponsored by: Regus

Related Articles

es_MXES