Empresas impulsan contenido nacional en México

Un total de 22 grandes empresas se comprometieron con la Secretaría de Economía a incrementar significativamente el contenido nacional de los productos que comercializan en México durante los próximos tres años.
Este acuerdo, anunciado por el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, abarca cadenas de autoservicio, tiendas departamentales, minoristas, farmacias, plataformas digitales y tiendas de conveniencia, quienes buscan fortalecer las cadenas de suministro locales y contribuir al desarrollo industrial del país.
Esta estrategia se presenta como una oportunidad para que México consolide su posición como uno de los principales centros de manufactura a nivel global, respaldado por una base industrial diversa, una ubicación geográfica estratégica y acuerdos comerciales sólidos que facilitan el acceso a mercados internacionales.
El plan incluye incrementos específicos por sector: las cadenas de autoservicio aumentarán el contenido nacional de sus productos del 50 al 70%, mientras que las tiendas departamentales pasarán del 30 al 42%.
Por su parte, las farmacias elevarán este indicador del 40 al 55%, y los comercios minoristas lo llevarán del 50 al 70%. Las empresas clasificadas como “otros” ajustarán su contenido nacional del 20 al 28%.
Las plataformas de comercio digital, además, se comprometen a dar mayor visibilidad a productos hechos en México en sus marketplaces, promoviendo la comercialización de bienes nacionales a gran escala.
Este enfoque no solo diversifica la oferta de productos locales, sino que también refuerza la competitividad del sector al reducir la dependencia de insumos importados, disminuyendo los riesgos asociados a las fluctuaciones cambiarias y a las interrupciones en las cadenas globales de suministro.
Aunque el acuerdo es voluntario, Ebrard subrayó que cada empresa ha firmado compromisos específicos, tras un análisis detallado de sus operaciones y oportunidades para sustituir importaciones. Esto no solo responde a una visión estratégica para reducir la dependencia del exterior, sino que también busca crear condiciones para el crecimiento sostenido de pequeñas y medianas empresas mexicanas, que ahora podrán integrarse más fácilmente en las cadenas de comercialización.
Sin embargo, la implementación exitosa de esta estrategia dependerá de la capacidad del sector para superar desafíos como los altos costos de producción, la burocracia regulatoria y la necesidad de mejorar la infraestructura logística y tecnológica para competir a escala global.
El impacto de esta iniciativa podría traducirse en la creación de aproximadamente 400,000 empleos adicionales en el sector manufacturero, consolidando a México como un referente global en la producción industrial y promoviendo una economía más integrada y robusta.
Este impulso es especialmente relevante en un contexto global en el que se busca diversificar las fuentes de suministro y fortalecer las capacidades productivas locales, aunque sigue siendo fundamental que se mantenga el ritmo de inversión en innovación tecnológica y capacitación laboral para asegurar una integración exitosa en las cadenas globales de valor.
Collaboration: Editorial Auge.